México.- Gran decepción y enojo experimentó La Muerte luego de acudir a la tienda de moda “Zara” para comprarse ropa a la moda, y verse más fashion a la hora de llevarse a las almas de la Tierra y arrójalas al infierno o el cielo (dependiendo de cómo se hayan portado).
El espectro señala que un amigo le recomendó ir a dicha tienda porque actualmente están las famosas rebajas y hay descuentos de hasta un 80%:
“Nunca había ido, lo que más me llamó la atención es que mucha gente de clase media realmente se siente rica y poderosa por ir a las ofertas a comprar ropa que al final hasta sale más barata que la del tianguis.
Mi conocido me dijo que los diseños de Zara están padres pero lo barato me saldría caro porque las prendas son tan frágiles que se deshacen a la tercera lavada.
Estuve a punto de ir mejor a otro lugar pero me di cuenta que en todos las tiendas hasta las tallas extra extra extra extra chicas se me caen, y ahí tenía la esperanza de encontrar algo que me quedara bien”, confesó.
La Muerte señala que nunca pensó que al ir a Zara su autoestima quedaría por los suelos:
“Siempre he recibido burlas por ser tan delgada pero en Zara fue lo contrario; me fui a probar un pantalón talla chica y para mi sorpresa no me entraba ni el pie, pensé que se habían equivocado pero me dijeron que esa es la medida de su ropa.
Luego pedí uno mediano y nada, una grande y no me entraba, lo peor fue cuando tuve que pedir uno extra grande y si me entró el pie al pantalón pero se me quedó atorado por el área del muslo. Me vi al espejo y me sentí una puerca, no podía creer que estuviera tan gorda, confesó entristecida.
La muerte menciona que la humillación fue mayor ya que los empleados no dejaban burlarse:
“Pensé que los empleados eran los dueños del lugar porque tenían una actitud muy altanera pero luego me di cuenta que solo doblan la ropa y ya por eso se sienten diseñadores de París. Al ver que no me entraba el pantalón se burlaban y cuchicheaban, al final me dijeron que en Suburbia vendían ropa para gente gorda y allá podía encontrar algo que me quedara”, dijo.
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El espíritu señala que se percató que no estaba obesa al encontrarse con Peter la Anguila:
“Ese día casualmente me encontré a Peter que también había ido a comprar ropa. Me di cuenta que a él sí le entró la talla extra grande pero muy apenas y le quedaba muy ajustada, al final los dos hablamos y llegamos a la conclusión que somos los personajes más delgados que existen y no es que nosotros estuviéramos gordos,sino que la tienda hacía ropa muy chica, por lo que enviamos una carta a la Profeco solicitando que regulen las tallas, sin embargo al final no dijeron que no podían hacer nada porque nadie está obligado a ir a comprar a esa tienda”, puntualizó mientras veía una playera que le había gustado pero que no podía comprar porque tampoco le entraba.
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Por: Omar Ariel Cortes