México.- Una de las mayores leyendas urbanas en México es la que asegura que en 1989, una joven Lucero se presentó en el programa “Siempre en domingo” de Raúl Velasco, y en plena trasmisión en vivo se echó un fuerte pedo que fue escuchado por millones de personas, ya que en ese tiempo no había otro medio más que la televisión, y la mayor parte de los mexicanos sintonizaba el programa.
La polémica fue tanta que incluso al día de hoy el vídeo del pedo ha sido imposible de encontrar, lo que ha provocado que algunos aseguren que la flatulencia nunca ocurrió, o que la misma Lucero comenté que todo fue un mal entendido, y jamás se echó el sonoro pedo en vivo.
Sin embargo, muchas personas de la época afirman que el incidente si paso, aunque Lucero diga que en realidad lo que sonó fue su traje de charro que portaba, que al agacharse para dar las gracias hizo un sonido extraño que se confundió con un pedo, pero solo fue el roce de la tela, según su versión.
Sin embargo, finalmente ha salido a la luz el video del momento, donde efectivamente Lucero se presenta en el programa portando un traje de charro, y en donde cierto momento se agacha para agradecerle al público que le estaba cantando las mañanitas por su cumpleaños, donde efectivamente, se escucha un fuerte ruido, que si bien puede ser confundido con otro sonido, no parece ser el roce de una tela, y si, de una potente flatulencia.
Tal como el rumor indica, el poderoso sonido sale justamente cuando Lucerito se agacha en sinónimo de reverencia, provocando que su metabolismo le jugara una mala pasada, y como pasa con todos, absolutamente todos los humanos, se echará un pedo, situación que en cualquier otro momento pudo haber pasado desapercibido, pero que en ese instante llamó la atención porque fue un pedo escuchado por millones.
El rumor es uno de los sucesos más curiosos de México, e incluso algunos lo han utilizado como ejemplo de teoría de conspiración, y como la gente se inventa historias que nunca ocurrieron y las transmiten de generación en generación, por su parte, Lucerito sigue aferrada a decir que el sonido fue el roce de su traje, y aunque se muestra sonriente cuando cuenta la historia, se aprecia en su expresión que se molesta por el incidente, sin olvidar que es humana y los gases estomacales son algo normal del ser humano.
Por: Omar Ariel Cortes