México.- Luego de revelar su preocupación por “salvar a las vaquitas amarillas”, el diputado, stripper y Patiño de México, Sergio Mayer, presentó al Congreso una iniciativa para “luchar por proteger la integridad de las Vaquitas Alpura”, señalando que por culpa de esta marca de leche la pobre vaca cada vez está más flaca y sin energías, por lo que es deber de los gobernantes evitar su extinción.
Mayer señaló que actualmente solo quedan cerca de 300 Vaquitas Alpura que son obligadas a bailar y perrear en los distintos supermercados, señalando que la nueva ley contempla que solo trabajen cuando ellas deseen, además de tener todas las prestaciones de ley:
“Me preocupa la vaquita amarilla pero más la Vaquita Alpura, ya que la otra vez fui al super y había una bailando, y regresé a las 2 horas y ahí seguía la pobre. Lo peor es que en algunos casos las obligan a darse un duelo de perreo intenso con el Osito Bimbo y otros personajes.
Es inhumano que después de ser ordenadas toda la mañana para sacarles la leche, todavía las obliguen a ir a bailar a los súpers, no se vale. Si no podemos salvar las vaquitas amarillas si podemos rescatar a las Alpura.
No digo que sean liberadas en su totalidad porque finalmente la marca de leche es su dueña, pero si que por lo menos tengan un horario de trabajo establecido, prestaciones de ley, y sobre todo, que las que sean ordeñadas en la mañana en la tarde no vayan a bailar y viceversa, para así evitar su sobreexplotación”, comentó.
Mayer señaló que ya hizo una investigación, y son 289 vaquitas repartidas en todo el país las que son obligadas a perrear en los súpers: “lo que no entiendo como con tan poquitas vacas sacan leche para surtir a todo el país, pero sobre todo, que luego de ser ordeñadas las obliguen a ir a perrear. No se vale, creo que las vaquitas amarillas no tienen solución, además creo que ya solo quedan 20 ejemplares, mejor enfoquemos en la Vaquita Alpura, ya que si no las salvamos no vamos a tener leche para nuestro cereal ni para otros alimentos”, puntualizó preocupado.
Por: Omar Ariel Cortes