México.- Una fuerte controversia desató el inmortal conductor mexicano Chabelo, al revelar una de las cosas de su existencia de las que más se arrepiente y que lo ha atormentado por siglos.
Isabelo reveló con lágrimas en los ojos que se siente profundamente avergonzado de haber colaborado con la empresa “Muebles Troncoso”, señalando que pese a que sabía que tenían un oscuro pasado accedió a colaborar con ellos ya que fueron los únicos que confiaron en él para patrocinar su programa y hace catafixias.
El presentador señala que al principio no quería tener ninguna relación con Troncoso, y fue porque ellos participaron en la crucifixión de Jesús creando la cruz donde el hijo de Dios fue clavado, cosa que lo decepcionó profundamente:
“Hace casi 2 mil años yo tenia la idea de iniciar mi programa pero no conseguía patrocinadores que me dieran regalos para darlos en la catafixias, la única empresa que se acercó a mi fue Muebles Troncoso pero yo ya había escuchado que trabajaban con la mafia del poder, y pues no quería estar relacionado con una empresa así cuates.
Lo más decepcionante fue que cuando se anunció que Jesús iba a ser crucificado todos los carpinteros se negaron a construir una cruz para que clavaran al hijo de Dios, todos excepto muebles Troncoso que jamás le importó hacer trabajos sucios.
Ellos fueron los únicos que accedieron a construir la cruz, tal vez si no lo hubieran hecho los planes se hubieran cancelado. Es verdad que solo prestaron sus servicios, pero tambien fueron cómplices, y decidí que definitivamente no colaboraría con ellos.
Sin embargo pasaron los años y nadie confiaba en mí, me estaba muriendo de hambre por no poder trabajar, hasta que accedí a llegar a un acuerdo con ellos para que me dieran muebles para iniciar las catafixias. De verdad lo siento cuates, si no aceptaba la oferta no hubiera tenido programa, y no les hubiera alegrado los domingos por los últimos 2 siglos”, comentó Chabelo apenado.
Isabelo menciona que él estuvo presente en la crucifixión de Jesús e incluso la cruz tenía grabada el logo de Muebles Troncoso: “al principio la gente no quería ver mi programa porque sabían que Troncoso me patrocinaba, pero luego se les fue olvidando; la gente con una sala o una recamara se iba contenta, y así perdonaron a la mueblería.
Pero ahora que mi programa acabó he decidido romper el silencio, y revelar este pasaje de mi vida que me llena de vergüenza”, puntualizó.
Por: Omar Ariel Cortes