México.- Para nadie es un secreto que los adelantos tecnológicos vienen a modificar nuestro entorno: no es opcional adaptarse a las nuevas tecnologías, es una obligación acomodarnos a ellas para vivir de forma plena en una sociedad.
Y aunque para muchos estos adelantos benefician a la humanidad, dándole un mal uso pueden perjudicar y ayudar a los delincuentes a cometer más fácilmente sus fechorías.
Ante la llegada de las nuevas generaciones que crecieron con las nuevas tecnologías uno se pregunta ¿qué pasaría si un millennial secuestrara a una persona?. Es obvio que utilizarla los aparatos a su favor pero ¿hasta dónde sería capaz de llegar?.
La respuesta la acaba de dar un joven de 23 años de nombre Germán Loera, que como la mayoría de los de su generación era Youtuber, y que decidió secuestrar a una empresaria originaria de Chihuahua.
El caso rápidamente llamó la atención de los medios primero porque el German aseguraba ser “empresario”, y en su canal de Youtube se dedicaba a dar conferencias y consejos de como triunfar en los negocios y empoderarse en el mercado laboral, y segundo, porque adaptado a las nuevas tecnologías decidió pedir el rescate no en dinero físico si no en Bitcoins, la moneda virtual que para muchos es un fraude y para otros una oportunidad fácil de volverse millonario rápidamente.
Según varios medios, fue precisamente el hecho de exigir la transferencia del rescate en Bitcoins lo que permitió la captura del joven y su banda, ya que gracias a eso pudo rastrearse el IP de la computadora donde la recibieron.
Tal vez Loera se emoción con la historia del rapero 50 Cent, que tras declararse en bancarrota logró volver a ser millonario gracias que fue de los primeros en confiar en el sistema Bitcoins, mientras otros prefieren no arriesgarse a invertir en ese sistema.
Y aunque varios medios aseguran que el joven secuestrador era “un exitoso youtuber”, la realidad es que antes del incidente tenía menos de 300 suscriptores y solo había subido 5 videos, los cuales están comenzando a tener miles de reproducciones pero por el escándalo que provocó su captura.
El chico que se sentía un gurú de los negocios subía videos con títulos como:
“Morir o innovar”, “¿Por qué si ese emprendedor debes viajar?”, “¿Uber o taxis?”, “La pregunta que cambio mi vida”, y el colmo “Conferencia en Congreso Mundial de Líderes Juveniles por la Paz” (no es broma).
Para su mala suerte, el chico se quedará con la ganas de gastar sus monedas virtuales, y ser pionero en comenzar a ejercer el nuevo modo de secuestro Millennial de pedir rescates en Bitcoins.
Por: Omar Ariel Cortes