México.- con un 100% de votos a favor, los integrantes de la Cámara de Diputados aprobaron “arrestar hasta por lapso de un mes a los mexicanos ridículos que utilicen el lenguaje inclusivo”, mejor conocido como “lengueje inclusive” que consiste en sustituir las vocales A y O por la “E” para que (según los ridículos que lo inventaron) “no exista distinción de género”, señalando que no van a permitir que en nuestro país haya personas que practiquen estas payasadas.
Fue el presidente López Obrador quien celebró que por primera vez los diputados de todos los partidos se pusieron de acuerdo “para aprobar una ley que salvaguarda la integridad de nuestro país”, ya que contrario a lo que las feminazis creen, aprobar el lenguaje inclusivo hubiera sido un retroceso para el país:
“Lo digo con todo respeto, ya llegó un punto en que las feminazis exageran y por todo quieren causar conflictos. Se quejan que muchas de las palabras como el ser humano, el planeta o los hombres son en terminación masculina y no es justo que se usen para definir no solo a los varones, sino a los seres en general incluyendo a las mujeres, señalando que por esto viven bajo el yugo masculino.
Pero no se dan cuenta, o más bien hacen como que no se dan cuenta solo para hacerla de pedo, que también existen palabras femeninas que definen a los hombres, como las personas, la Tierra, la vida o algo tan simple como una mesa.
Así como existen términos masculinos para definir a las cosas, también los hay femeninos, pero el chiste es estar chingando por todo. Así que por lo menos en este país quien haga la payasada de sustituir la A y la O por la vocal E, estará incurriendo en un delito y será trasladado a prisión hasta por un mes. No estamos en secundaria para estar tratando de adivinar lo que dice alguien Cuendo heble esí y ne se le entiende nede per cembier les veceles por la E, sen tenteríes que vemes e eliminer definitivemente”, cementé Lepéz Ebreder.
AMLO señaló que las personas que ingresen a prisión recibirán electroshocks y clases de gramática para que entiendan que existen términos femeninos y masculinos: “como mencioné, las feminazis aseguran que les parece injusto que para referirse a un grupo en general siempre se haga en término masculino, pero también hay muchos términos femeninos y no veo que los hombres salgan con el pito de fuera a manifestarse para que las palabras femeninas se vuelvan masculinas.
En fin: si quieren hecer sus ridiculeces serén encerredes en prisién, perque ye esten muy grendecites pere sus peyesedes, y ne vemes e permitir que pengen en ridícule e Méxice e nivel internecienel usende este mede petétice. Este es le últime vez que heble en idiome inclusive, sele le hege pere que les entre en le cebeze le nueve ley”, puntuelizé el presidente.
Por: Omar Ariel Cortes, idea de: Rusel Macias
LENGUAJE SEUDOINCLUSIVO (@, X, *, E)
Los seudoinclusivistas inútilmente tratarán de buscar la solución al problema de género gramatical en la modificación morfosintáctica por una letra, es la estulticia de las estulticias que a nada conduce.
La simple y original estructura de género gramatical castellano son tres, de los cuales sólo mencionaremos dos:
1.- Masculino (e, o).
2.- Femenino (a, i).
De manera que usar la «e» como inclusivo o neutro no da resultado, es contradictorio, vuelven a caer en el masculino estructurado.
La solución al género gramatical neutro está por otro lado y no por los caracteres ya mencionados aquí «e, o», «a, i».
De ninguna forma pretendemos invisibilizar a la mujer cuando en realidad existen la alternativa para que séan nombrados junto con el hombre en única palabra.
El género gramatical neutro que tiene la función de nombrar a ambos géneros en único término, fue infiltrado por idiotas de la edad media y ahora quieren hacer con el masculino, eso ya no pasará por alto ante el veredicto de la consciencia pública (seiscientos millones de hispanohablantes).
Y si alguien viene con su lenguaje seudoinclusivo (@, x, *, e) automáticamente es repelido, porque no es propia de la lengua castellana, simplemente porque no cabe en el inmutable patrón gramatical del castellano, cuyos signos mencionados ya están estructurados para tal oficio y no para uso del seudoinclusivo.
No hay necesidad de usar ese lenguaje seudoinclusivo (@, x, *, e). Hacerlo es señal de debilidad para quién lo use, por el solo hecho de dejarse llevar con la moda fatua dementes.
La incorporación de los signos (@), (x), (*), (e) como inclusivo no funciona, dado que en el idioma castellano la vocal «e» es naturalmente masculino, (x, @, *) son impronunciables, y es que la gramática de la lengua castellana está casi perfectamente estructurada sin dar más cabida para todos aquellos atrevidos que intentan deformarla.
Con el cambio morfosintáctico (e) no se consigue la igualdad, ni la equitatividad, ni peor aún la integridad.
La reformación del idioma va mucho más allá y que nada tiene que ver con la inaceptable idea del lenguaje seudoinclusivo.
Para los indignos que incentivan el lenguaje «inclusivo que se expresan con duplicación y triplicación (os/as), (os, as, es)», «seudoinclusivos que usan (@, x, *, e)» y «colectivos (estudiantado, profesorado, alumnado, funcionariado, etc.)»; todas las puertas están cerradas, menos una, La GRAMÁTICA CASTELLANA (Ortología, Analogía, Sintaxis, Ortografía). Es claro que si se arrepienten aunque sea en el último instante podrán ser ayudados a fin de enmendar sus errores por atrevido intentando deformar el idioma.
La gramática no tiene culpa que los no binario (transgéneros y toda la gama de aquellos que están más perdidos que los mismos perdidos en la orientación sexual) no se identifiquen con lo binario, quienes se autoexcluyen a sí mismo, se auto oprimen, se auto ofenden, se autovictimizan, se rasgan sus vestiduras, truenan y relampaguean, caprichosos así son esclavos más abyectos de su propio mal y no de la binaridad del género gramatical.
Para aquellos que no se identifican dizque con ningún género, les decimos que están dentro de la categoría binaria de masculino (si es varón) y femenina (si es varona). Por naturaleza existen tres sexos y tres géneros gramaticales, de los cuales sólo hablaremos de dos géneros en común que se designan según el sexo al nacer, de aquí a tener que conformarnos con el sexo que la ley de la naturaleza nos dio.
Si nace varón, varón es.
Si nace varona, varona es.
No hay tal género neutro para los no binario.
¡Así de simple! ¡No hay más!
Aunque el mono se vista de seda, mono queda.