México.- No sabemos si se trata de una parodia o realmente existe alguien tan descarado, pero el día de hoy se hizo viral el vídeo de un supuesto ratero, quien suplicando, pide al gobierno “darles protección ya que la gente ahora ha comenzado a defenderse de que los asaltan”, al grado de que las victimas los agreden y hasta los matan, además de pedirle a la gente que “no hagan trampas como cargar dos celulares, uno chafa y uno bueno, para cuando los asalten engañar al ladrón y darles el celular barato”, quejándose además de que “el gobierno no les brinda ni Seguro ni prestaciones”, por lo que piden también estar protegidos.
En el vídeo de apenas un minuto, se aprecia a un joven cubierto de la mitad de su cara con un pañuelo para no ser reconocido, y solicitando la protección al gobierno:
“Buenas tardes mi gente, este video es para el gobierno, para que nos ayuden, nos apoyen. No se si han visto, pero nos estan matando (a los asaltantes)… nosotros pedimos al gobierno un trato justo, un trato digno. Ya la gente no se espanta como antes, uno sale a robar y pinche gente ya trae dos celulares, el chido y un pinche chicharrón (chafa), y nos dan el chicharrón, uno trabaja sobre pedido mi gente, no se pasen de listos, llega uno a desembolsar lo que se chingó y salen los Nokias con la lamparita, ya no podemos seguir así. Ahora nosotros no tenemos ni Seguro ni prestaciones y nos andan dando en la madre, tenemos que llegar a curarnos los pinches chipotes con agua y con sal, y con remedios caseros porque ni para el pinche Seguro nos da el gobierno, solamente pedimos seguridad para trabajar…porque ya no puede seguir esto así, ahora el ratero sale a robar con miedo, esto no puede seguir así gente, espero le llegue al gobierno y nos apoye. Eso era todo banda, gracias”, se escucha al joven.
Por ahora, varios “medios serios” y “líderes de comunicación” han replicado el vídeo del chico, aunque no dudamos que solo fue un Brayan decente haciendo una broma, o quien sabe, en este país todo puede pasar y puede que la petición sea real.
Por: Omar Ariel Cortes