1.- Comienzas a acelerar cuando el semáforo cambia a verde aunque haya personas cruzando: ¡por supuesto que tienes todo el derecho de atropellar a los peatones!, la gente tiene la culpa de no ser invisible y haber tenido la mala fortuna de pasar en rojo sin saber que a los .3 segundos el semáforo cambiaría a verde. Era tu momento de pasar, si la otra persona estaba atravesada fue su error, ¡puedes atropellarla sin remordimiento!.
2.- Dejas a tu perro (generalmente de raza agresiva) en tu cochera: ¿por qué tomarte la molestia de poner a tu perro en tu patio para que solo te moleste a ti si puede ladrarle y espantar a todas las personas que pasen por tu casa y en una de esas morderle la mano –u otra parte del cuerpo- a un niño o un adulto?
3.- Manejas como si estuvieras en una persecución de “Rápido y Furioso”… en una zona peatonal donde debes ir máximo a 15 km/h: aceptémoslo, manejar a 100 km/h en una zona peatonal no te hará ver como un experto y arriesgado conductor, te hará ver como un ridículo que se siente Dominic Toretto y que en lugar de meterse a una carrera de autos pretende quedar como un aguerrido experto del volante manejando en una zona donde pasan personas, niños y que simplemente no está diseñada para que alguien conduzca a tal velocidad.
4.- Te tardas en el cajero (por cosas estúpidas) sin pensar en los que están esperando: si eres de los que se pone a contar el dinero cuando lo recibió sin darle paso a los demás, a meter y sacar una y otra vez la tarjeta con la esperanza de que cuando la vuelvas a insertar tendrás más dinero, o a realizar tus movimientos con paso de tortuga como si fuera la primera vez que utilizarás el aparato, entonces hay malas noticias, realmente no eres tan inteligente como crees.
5.- Te pones a caminar de la mano con tu novia sin dejar pasar a la gente: las personas deben de entender que tú dominas la calle y los demás son tus súbditos que deben bajarse solo porque tú no tienes la decencia de hacerte de ladito para no dejar a tu pareja ni un segundo solita (como si se la fueran a robar), impidiendo así que los demás transiten fluidamente por la calle que es pú-bli-ca (no tuya). Sufres doble ineptitud si además van caminando a .002 km/h.
6.- Te pones a hablar en medio de una pasada… sin dejar pasar a los demás: si eres de los que consideran que el lugar idóneo para “echar chisme” es justo la parte media de una pasada o calle, y peor aún, que no pretende quitarse para que la gente siga su camino sin necesidad de esquivarte, lo más probable es que no razones bien y te le hayas caído a tu mamá cuando eras bebé.
7.- Cuando vas en el camión no te recorres para no dejar sola a tu novia que está sentada (o a tus amigos).- ¡por supuesto que es una falta de respeto para la persona con la que vas platicando dejarla solita a pesar de que eso signifique que otros usuarios no puedan subirse porque tú no permites que la gente se recorra! Al final de cuentas es más romántico ser un estorbo que portarse descortés ¿o no?
Por: Omar Ariel Cortes