México.- Gran asombro y desconcierto causó el Gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, al arribar a un evento benéfico y no ser reconocido por absolutamente nadie luego de que perdiera más de 600 kilos de peso en menos de 2 semanas.
Según los presentes, cuando el delgado hombre se presentó como Agustín nadie podía creer que fuera él, ya que ahora luce una complexión aproximadamente 50 veces más delgada de la que tenía antes:
“Cuando el delgado hombre llegó pensamos que se trataba de un empresario extranjero porque nunca lo habíamos visto antes. Fue hasta que se subió al pódium para dar unas palabras y mencionó que era Carstens que nos dimos cuenta que era el gobernador. Por supuesto todos nos quedamos con la boca abierta, aunque ahora está más flaco su cara luce casi casi igual, ya no tiene su papada pero sigue conservando sus cachetotes, por eso no dudamos que efectivamente era él”, dijo un reportero.
Por su parte, el asistente de Agustín reveló que su jefe logró bajar más de media tonelada de peso luego de “seguir su propio consejo de comenzar a comer con solo $320 pesos a la semana”:
“Carstens hace poco declaró que $320 pesos son suficiente para que una familia compre despensa para comer una semana (incluyendo la comida del gato o el perro). Si tomamos en cuenta que Agustín es solo una persona, y suponiendo que aseguró que con esa cantidad come una familia de 3 integrantes (más la mascota), eso quería decir que a él le correspondían solo $80 pesos a la semana para comer. Mi jefe intentó sobrevivir con los $80 pero no pudo, pero lo que sí pudo lograr fue comer con los $320 semanales, callándole así la boca a todos los que dudaban de él”, confesó el trabajador.
El asistente señala que Carstens compró sus $320 de despensa para iniciar el reto pero se acabó el 90% de los alimentos en solo 5 minutos:
“Él quiso hacer su propio reto para demostrarle a la gente que son unos exagerados y con ese dinero basta para comer y hasta darse uno lujito, sin embargo no contó con que se comería casi toda la despensa en menos de 5 minutos (ya que él está acostumbrado a gastarse esos $300 pesos diariamente solo en botana para calmar el apetito antes de irse a comer).
Admito que mi jefe hizo trampa ya que antes del reto se colocó una banda gástrica para que no le diera tanta hambre y poder aguantar (entre otros muchos trucos), al final en solo 12 días había adelgazado 602 de los 635 kilos que pesaba por tanta hambre que paso, provocando que actualmente solo pese 33 kilos”, relató.
El ayudante señala que aunque Agustín literalmente “se murió de hambre” pudo cumplir su propio reto:
“Él dijo que con $320 semanales podía comer una familia, pero nunca especificó si bien o mal. Finalmente demostró que con esa cantidad una familia sí puede comer… solo un par de migajas, pero finalmente comer. Por lo que al final demostró que tenía razón y dejó en ridículo a quienes lo criticaban, además de que logró adquirir (después de años de intentarlo) la estilizada figura que siempre soñó tener”, puntualizó.
Por: Omar Ariel Cortes