Los periódicos chayoteros no saben qué hacer ya que temen hacerse acreedores a una multa si publican verdades que perjudiquen a los que los sobornan

Los periódicos chayoteros no saben qué hacer ya que temen hacerse acreedores a una multa si publican verdades que perjudiquen a los que los sobornan
Se quisieron hacer los graciositos tiernitos, cuando ya todos sabemos que sus notas son alteradas todo el año para lamerle las patas a la persona que los patrocina