México.- Don Pedro Sánchez, un hombre de 45 año que desde hace 20 se dedica a ser taxista, comenta que no entiende “como es que la pinche gente es tan huevona de ya no salir a la calle a esperar un taxi”, y ahora prefieren tener esa porquería de “Uber” y similares, que de forma desleal le han bajado la chamba.
Mientras comía unas garnachas adentro de su taxi y fumaba al mismo tiempo, dejando apestado la unidad, mencionó que la competencia de Uber es desleal, ya que además esos weyes ni ganan todo el dinero exclusivamente para ellos, porque lo tienen que compartir con la aplicación, declaraciones que dio a pesar de que durante 15 años el manejó un taxi rentado:
“Viene una empresa gabacha y agarra mexicanos pendejos para manejar su aplicación, antes yo hacia mi agosto cuando llovía y se inundaba, todos me rogaban por que los subiera, a veces hasta por mamón me daba el lujo de dejar esperando a la gente mojándose, o simplemente llegaba más tarde cuando me mandaban a un lugar del Radio Taxi.
Y ni que decir de esos tiempos cuando podías cobrarle a alguien $70 pesos por recorrer 3 cuadras de distancia diciendo que era la tafia mínima, ¡o hasta cobrar porque el acompañante de alguien se bajara una cuadra antes!, así es ¡podríamos cobrar un extra cuando si iban dos personas, uno se bajaba unas calles antes!, y todavía lo hago, pero ya muchísimo menos porque no tengo clientes.
Lo que todavía podemos seguir estafando son los turistas, como algunos vienen y no traen su aplicación o no les funciona, pues a huevo nos toman y ya con eso se nivela el ingreso. La otra vez le cobré a unas gringuitas $300 pesos por 2 kilómetros, y pues ya ahí saqué lo que no ganó por culpa de esas aplicaciones”, comentó con la camisa desabrochada hasta el ombligo.
El hombre además señala que eso de que su unidad apeste, y todavía se enoje “si alguien se sube con los pies llenos de tierra”, no tiene que influir en que ya no lo quieran: “estoy todo el día sentado, me duele la cintura, y llega gente subiéndose bien recio, moviendo el carro, o cierran bien feo la puerta, y todavía se emputan porque les digo que respeten mi unidad. Así no se puede, además esos del Uber también te estafan, cobran más caro cuando hay demanda, y ya casi todos mis compañeros taxistas se fueron para allá por lo que es el mismo trato. Así que tu digas que buen servicio no dan, ya ni chingan, es casi lo mismo que nosotros y nada les cuesta salir a la calle, y esperar 30 minutos a que pasemos”, comentó mientras se echaba una siesta, pese a que desde hace 20 minutos había quedado de ir a recoger a una persona.
Por: Omar Ariel Cortes