México.- Eduardo trabaja en una empresa de comunicación y nunca ha logrado hacer algo relevante en su vida y que se enfrenta al problema de que -según sus palabras- “ninguna persona nunca valora el exorbitante talento que posee”, estalló en ira contra uno de sus colegas de oficina luego de que el compañero ganara un concurso de fotografía.
Eduardo tachó de “sobrevalorado” el proyecto de su compañero y rápidamente argumentó que “él hubiera podido haber hecho un trabajo muchísimo mejor” pero seguramente no hubiera ganado porque todo el mundo está en su contra y se unen para no reconocerlo a pesar de que es uno de los humanos más talentosos del mundo.
Aunque Eduardo nunca ha triunfado en nada, inmediatamente citó a su colega ganador a una plática para argumentarle que el trabajo que había realizado “pudo haber sido mucho mejor” y criticarle todos los “defectos que el proyecto tenía”:
“La verdad de tus fotos anteriores a estas si has mejorado bastante porque antes eras pésimo. Admito que si ya no estas tan verde pero si hubieras realizado otro tipo de enfoques, encuadres, juego de luces y ejecutado el concepto de otro modo hubiera sido muchísimo mejor. La verdad yo no te hubiera dado el premio pero pues están bien las imágenes. Échale ganas y a la otra si quieres me hablas para que te ayude”, señaló el hombre que se niega a aceptar que nació sin talento.
El oficinista-que no deja de compartir en Facebook todo lo que realiza durante el día para tratar de ganar likes y sentirse así un triunfador– señala que actualmente se encuentra realizando “un proyecto musical independiente” (ya que su sueño siempre ha sido ser productor musical y si se puede cantante) que triunfará a nivel internacional.
“Acepté este trabajo de oficina de manera temporal en lo que desarrollo mi proyecto artístico que estoy seguro se volverá un hit inmediatamente. Admito que hasta ahora no he hecho nada relevante pero en unos años van a ver hasta donde llegaré. No será fácil porque a las personas les da miedo valorar el trabajo de alguien realmente talentoso y por eso la mayoría de la gente que termina triunfando es gente mediocre. Actualmente estoy desarrollando mi propia casa productora musical porque mi sueño es ser productor y por ahora soy oficinista pero en breve lanzaré mi primer trabajo artístico”, comentó.
Eduardo aseguró que sus colegas deben aprovechar el tiempo que durará en la oficina antes de que renuncie y se vuelva famoso.
“Estoy dispuesto a darles consejos de como mejorar sus trabajos, proyectos personales y laborales. Tengo una visión muy amplia y no siento que sea malo decirle a los demás que hacen pura porquería porque es la verdad, además no lo hago porque los quiera hacer sentir mal, sino porque si siguen mis sugerencias triunfarán en la vida y se convertirán en unos verdaderos ganadores”, señaló mientras despotricaba contra el trabajo de otro compañero, capturaba unos datos en Excel y soñaba despierto que ganaba un Grammy.
Por: Omar Ariel Cortes