Calderón intentó controlarse y no acabarse las caguas, pero empezó con una y se acabó casi 200 cartones

Calderón intentó controlarse y no acabarse las caguas, pero empezó con una y se acabó casi 200 cartones
Estan dispuestos a aceptar el hueso que Margarita Zavala les dé, aunque sufran el riesgo de que se les atore en el pescuezo