Estudihambre que pide prestado $50 pesos para no morir de hambre, se burla de joven que exigió sus $37 de regreso

México.- Juancho Sánchez, un estudihambre común de la Universidad Tecnológica de su estado, sorprendió a sus amigos al “burlarse de forma despida” del joven que se hizo viral en las redes por exigirle a su pretendienta que le regresara los $37 pesos que invirtió en su cita, argumentando “que es patético pelearse por una cantidad tan miseria”, aun y cuando él mismo ha suplicado que alguien le preste esa cantidad para no morir de hambre.

Los conocidos de Juancho señalan que es común que el chico constantemente les pida “$50 pesos prestados para completar la semana”, ya que siempre se gasta el poco dinero que le dan sus papás en Tonayán o ir a darse un lujito como comer tacos en la noche, situación que provoca que literalmente a los 3 días de regresar de su pueblo este mendigando que alguien le preste aunque sea los $37 pesos de los que tanto se burló:

“Entendemos que haya gente que considere al tipo de los $37 un tacaño extremo, pero Juancho se burla de él llamándolo patético y miserable, cuando él mismo a los 3 días de regresar de su pueblo para estudiar, se acaba todo el dinero que le dan en Tonayán o irse a cenar en la noche, y a todos anda suplicando un poco de dinero.

Incluso es el típico que si le prestas $50 pesos y luego se los cobra se enoja y te llama miserable, pero si él te presta $20 pesos no deja de molestarte hasta que se los regreses el último peso, echándote en cara que por no pagarle ya no tiene para su camión o para una Maruchan.
Lo despectivo no es que se burle del tipo viral que pidió sus $37 de regreso, sino que lo llama fracasado cuando él cada semana suplica que alguien le preste $50 o ya de perdido los $37 para comprar aunque sea unos Sabritones, y no morir de hambre”, relataron.

Según varios investigadores, se percataron que 9 de cada 10 estudihambres y hasta uno que otro Godínez, mendigan $37 pesos para “completar su semana”, sin embargo, no dejan de argumentar en redes que el joven que pidió esa cantidad de regreso “es un tacaño extremo”, y se burlan de él a la par que buscan en su pantalón si de casualidad encuentran una moneda de $10 pesos perdida, para poder comprar tortillas con sal, y mitigar un poco el hambre que sienten.

Por: Omar Ariel Cortes

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