Londres.- Actualmente existen dos tipos de personas: las que nunca han entrado a una aplicación “para ligar y conocer gente” (o las usaron una semana, les aburrió y nunca las volvieron a utilizar), o los que utilizan esta herramienta constantemente como una nueva forma para conocer y conquistar, principalmente porque en la vida real son introvertidos, tímidos y aburridos, y las aplicaciones les permite “ser una versión mejorada de si mismos”, y fingir ser alguien que no son, tanto físicamente mejorando su apariencia con miles de filtros o buenas poses, y como en su personalidad, con conversaciones fluidas y amenas que en vivo no tienen.
Todos sabemos que en las redes nadie es 100% como en la vida real, sin embargo, algunas personas literalmente se hacen pasar por otros seres humanos utilizando personalidades falsas, y algunas veces, logrando que varios caigan en sus trampas.
Tal fue el caso de Xavier Duarte (no, no el gobernador de Veracruz, sino un hombre gay originario de Londres de 34 años) quien sabiendo que Tinder está lleno de calenturientos y a él “le excitan los hombres machos heterosexuales”, decidió hacerse pasar por mujer para convencerlos de tener una cita y posteriormente abusar sexualmente de ellos.
Xavier fingía ser “una ama de casa de mediana edad aburrida de su vida marital”, argumentando que ya estaba harta de su esposo y de su vida, y deseaba tener encuentros fogosos para distraerse su monótona existencia. El hombre mandaba a sus presas fotos de una sexy mujer que encontró en la red, y hablaba con los hombres por teléfono fingiendo voz femenina para calentarlos con relatos eróticos, para posteriormente citarlos en su departamento, aunque los hombres descubrieran que la fogosa fémina que iban a conocer en realidad era un hombre treintón pelón.
Lo curioso es que Duarte si los convencía de tener sexo pese a no ser la mujer que prometió, ¿cómo lo hacía?, pues resulta que (aquí entra la violación) en su invento de que era una mujer casada que solo quería tener encuentros casuales y discretos para no poner en riesgo su matrimonio, el hombre les decía a los individuos que dejaría abierta la puerta de su departamento para que ellos entraran, con la condición de que fuera con los ojos vendados y no la tocaran, esto como una especie de fantasía que “ella tenía” y para mantener la privacidad, pero en realidad era para que no se dieran cuenta que era un varón.
Según comenta la policía, varios individuos que cayeron en su trampa de Tinder, siguieron a la orden las indicaciones de “la mujer”, entrando a su departamento con los ojos vendados y sin “tocarla”, dejándose hacer sexo oral y penetrándola con los ojos cerrados, para luego descubrir que con quien habían tenido sexo era con un hombre.
Los reportes indican que por ahora hay solo 4 afectados que pusieron una denuncia por violación, provocando que el tocayo del gobernador de Veracruz fuera detenido, y se le realice un juicio el próximo noviembre. Aunque claro, tal vez hay más afectados que no quieren denunciar por pena.
Independientemente de que la persona les pidiera entrar con los ojos vendados y resultara ser un gay, ¿no llegaron a sentir miedo de que tal vez si fuera una mujer pero los descuartizara?, ¿o los fuera a secuestrar?, ¿o los filmará y luego esparciera los videos?, en fin, tal parece que la calentura es fuerte y si se une con la desesperación, ocurren este tipo de casos. Así que ya saben, analicen bien a sus próximos ligues de Tinder.
Por: Omar Ariel Cortes