México.- Gran sorpresa se llevó Armando Acuña, un hombre mexicano de 20 años de edad, luego de que su vida diera un giro de 180° al ponerse un “saco blazer” (saco más casual que el que se utiliza en trajes formales), y de repente todos comenzaran a percibirlo como alguien sumamente atractivo, interesante, millonario y magnate.
El hombre menciona que desde que se puso el saco sintió como se elevaba de clase social y se veía mas interesante, señalando que además -según él- “así lo ve toda la sociedad”:
“Acompañé a un amigo a Zara para comprar un outfit para una fiesta, y de paso yo me llevé algo aprovechando que era El buen fin. Antes casi no salía, me la pasaba estudiando pero ya voy a empezar a ir más seguido a los antros y fiestas.
En cuanto me probé el saco blazer toda mi imagen cambio: me veía más formal y magnate, de hecho lucia tan millonario que hasta podría parecer sin problemas el hijo de Carlos Slim, y no solo eso, mis rasgos se veían más finos y mi cuerpo más estético. Definitivamente el saco hizo que me convirtiera en un adinerado mirrey, o a menos esa apariencia diera, y eso que vivo de mi beca Manutención (Pronabes)”, comentó.
Según los amigos de Armando que lo vieron creyéndose la última Coca Cola del desierto gracias al saco, el joven no dejaba de poner sus manos en la parte donde se cierra la prenda (como si estuviera nervioso y solo poniéndolas ahí calmara la ansiedad), e incluso posaba en las fotos con la típica actitud como si se fuera a cerrar el saco pero sin hacerlo, y además caminaba de una forma mas erguida y con el trasero parado, ya que con el saco se sentía el buenote que México esperaba:
“A mi Acuña siempre me saluda en la escuela, pero ahora que andaba muy elegante según él con su saco hizo como que no me conocía, como si fuera muy exclusivo. Cuando trae esa prenda realmente siente ser el magnate que México esperaba, lo raro es que camina más erguido de lo normal y hasta mueve más el trasero, es decir, no solo se siente mirrey, si no cree que con el saco se ve mucho más sensual e interesante. Él pobre se siente en otro nivel”, comentó un conocido.
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Los amigos mencionan que el saco literalmente le cambia la personalidad a Armando ya que cuando anda de ropa casual se siente “un humano más del montón”, pero apenas es pone el blazer se considera inalcanzable:
“Cuando se pone el blazer cree que no merece juntarse con los plebeyos, y según solo se toma fotos con gente de su nivel que también usa saco.
Realmente nadie lo ve como el hijo de Slim aunque él cree que eso, pero si es feliz viviendo esa falsa ilusión y posando en las fotos presumiendo su saco agarrándose las mancuernillas, metiéndose las manos en la bolsa del pantalón para enfatizar la caída de la prenda, o con la típica pose que parece que se cerrará el saco sin hacerlo, pues allá él. Realmente nadie lo ve como la mezcla de un modelo magnate y millonario que él cree ser por usar esa prenda”, puntualizaron.
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Por: Omar Ariel Cortes
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