1.- Tiene intereses ajenos a la fotografía, sin embargo –por alguna extraña razón- al comprar su primera cámara profesional (de una marca reconocida y cara) descubre que “tomar fotos siempre ha sido su pasión más grande pasión en la vida”.
2.- Se sorprende de la alta calidad y nitidez de las imágenes que puede tomar su cámara profesional, y lo confunde con tener talento.
3.- Comienza a fotografiar edificios, atardeceres, flores, close up de fuentes (mientras cae el chorro del agua) y otras cosas trilladas y sin chiste, pero asegura que tiene una habilidad tan exorbitante que sus fotos -aunque son iguales al resto- reflejan el enorme talento latente que tiene dormido.
4.- Aprende a toma fotos en modo “manual” y comienza a burlarse de los que las personas que retratan en automático. Cree y está seguro que por fotografiar en manual es más chingón y perspicaz que el resto de los seres humanos, aunque sus fotos salgan oscuras, semi borrosa y poco nítidas.
5.- Comienza “a elevar la calidad visual y temática de sus fotos” y por eso empieza a retratar fiestas típicas, le toma fotos a niños indígenas (acompañadas de la frase “esto sí es verdadera belleza”), a arrugas de viejos, a rebozos de señora y a otras personas y cosas que él considera “originales y que nadie se ha atrevido a retratar”.
6.- Entra a la etapa en que cree que si toma una foto de un ángulo “raro” y difícil su trabajo será más impactante. Entre más dobla su cuerpo y más se contorsiona, más original y arriesgado cree ser (se tira al piso, tuerce una pierna y mete la otra para quedar en una posición extraña, entre otras poses raras y difíciles que–según él- ayudarán a que sus fotos salgan mejores y diferentes al resto).
7.- Se da cuenta “que la fotografía no solo es algo estético sino también debe de tener alma y esencia” y por eso empieza a retratar “las cosas metafóricas de la vida” como cigarros consumiéndose (para reflejar el indeleble paso del tiempo), o incluso llega a sentirse un visionario que romperá tabús y normas sociales impuestas, y por eso convence a una amiga drogadicta de posar desnuda a cambio de mota o tachas, y bajo el pretexto de que la foto será “artística y marcará un antes y un después en la historia mundial de la fotografía porque por primera vez se mostrará el cuerpo femenino sin tapujos ni censuras”.
8.- Descubre que si toma las fotos en blanco y negro “capturará de una manera más idílica y poética la esencia de las personas y cosas”, además de que genera un sentimiento más abstracto (sus álbumes de Facebook comienzan a llenarse de fotos en blanco y negro o sepia tomadas por él).
9.- Se le termina la etapa (después de 6 meses o un año) de tomar las fotos descritas en los puntos anteriores e ingresa al ciclo de experimentar con “fotos comerciales”, y por eso le pide a sus amigas “menos peor” de la escuela o su cuadra que se presenten como modelos para realizarles una sesión glamorosa tipo moda. La elegida no tiene nada de espectacular pero se siente la nueva top model, y el fotógrafo se siente novedoso y talentoso por exigirle a su amiga que imite las poses de las modelos profesionales que vio en las revistas.
10.- Se mete a un concurso de su universidad o logra que expongan su obra en el museo regional de su ciudad. Si compite contra otros 3 fotógrafos wanna be y gana (o logra que exhiban sus retratos en el museo) comienza a sentir que ya está a un paso de ser recordado como uno de los iconos de la fotografía del siglo XXl.
11.- Se da cuenta que con el concurso que ganó en su escuela o en el museo regional no paso absolutamente nada. Como quiere vivir de la fotografía comienza a ofertar sus servicios para bodas, XV años y otros eventos (este trabajo será solo temporal en lo que llega a la cima).
12.- Como no triunfa comienza a argumentar que no le molesta dedicarse a ser fotógrafo de eventos porque obtiene más dinero tomando fotos de bautizos que en una oficina donde estaría encerrado todo el día.
13.- Compagina su trabajo de fotógrafo de bodas con su hobbie de tomar fotos espectaculares y poéticas, las cuales comienza a firmar son su nombre más la leyenda “photography” ya que siente que sus imágenes son tan impactantes que tiene que protegerlas por si alguien se las quiere robar y exponerlas en un museo de París sin su autorización.
14.- Pasan los años y no lo llaman de las revistas porque en realidad sus fotos siempre fueron (y seguirán siendo) monótonas. Asegura que no triunfa porque su trabajo es tan excepcional que a la gente común y corriente le cuesta entenderlo pero en unos años (como sucede con todos los buenos artistas) finalmente reconocerán y valorarán su obra. Continua tomando imágenes de XV años, bodas, y haciéndole sesiones a sus amigas menos peor que se sienten modelos profesionales.
Por: Omar Ariel Cortes